Sólo él ♥

¿Qué importancia tiene todo cuando sólo una persona te da lo que más querés?
Sí, tengo a esa persona y siento que no necesito nada más que eso.

lunes, 17 de diciembre de 2012

Qué ilusa me siento.

Tengo ganas de sacarme de encima esto, sé que nunca te lo voy a decir porque me da mucho miedo y porque ya no te quiero en mi vida, pero tengo que sacarlo.
Esa tarde me saludaste haciéndote el nene bien y no te aguanté más. 
-¡Qué falso sos! -te grité.
-Sé que estás enojada -me dijiste como si nada-, pero ya no somos nada. No me podres reprochar ni el aire.
-¿Sabes cuál es el problema? Que no seamos más nada, que vos creas que ya no puedo reprocharte nada no quiere decir que tengas que convertirte en esta persona, la persona que sos ahora. Me causas repulsión -te dije- y el verdadero problema es la decepción que siento. Decepción que se mezcla con impotencia, porque no puedo hacer nada por vos, porque sé como eras antes y me gustabas así. Ahora sos esto, que no sabría como clasificar. Me haces acordar ciertas cosas, pero una muy importante: por qué terminamos así.
-No me vengas con planteos estúpidos -me dijiste mirándome con recuerdos en los ojos. Podía ver las imágenes cruzando por ellos y el rencor que te generaban y el amor que añorabas, no lo niegues porque era así -. Si vas a, prácticamente, escupirme esas palabras innecesarias, mejor callate.
-No, no te voy a escupir nada. Tengo ganas de que te acuerdes de algunas cosas, solo eso -te miré como esperando una respuesta -. Siguiendo con lo que te decía... No me había olvidado de por qué terminamos así, pero al parecer lo alojé en algún espacio lejano de mi mente, porque me sorprendió recordar todo. 
-Yo te amaba tanto... -susurraste.
-Y me molesta por sobremanera la persona que sos hoy, porque antes hubiera creído tus palabras, tus te amo o te amaba, pero ahora te escucho y me da igual lo que digas, sé que mentís. Y aunque no lo creas, me duele. Me duele pensar y recordar que yo me enamoré de una persona tan suave... Me duele ver que ya no existe, que hoy es puro maquillaje, que si se lo sacas hay un rostro frío, se me hace ajeno. Y si querés, hasta te digo que es lo que más me duele -estaba conteniendo las ganas de llorar.
-A mi me duele esto que vos me estás diciendo, me mata -volviste a susurrar-, pero contame. Ahora quiero saber.
-Sinceramente, lo que más duele de todo esto no es acordarme de cómo eras y ver lo que sos hoy, lo que más me duele es no poder evitar pensar que  capaz antes también eras así y yo nunca me di cuenta. Tal vez antes también era puro maquillaje y yo me lo creí. Me siento tan ilusa... -sollocé.

Ahora lo que entiendo es ese silencio que hubo a continuación: no dijiste nada. Me negué mucho tiempo a entender ese silencio, pero ya no. Ahora sé que era porque yo estaba en lo cierto, no eras vos. Me creí tu amor y todos esos engaños, los creí ciertos hasta hoy que ya me rendí. Hoy, por fin, acepto que fuiste y sos una completa mentira.
Agradezco haber dejado todo ese rencor lejos, ahora avanzo tranquila con gente que no miente, que expresa sentimientos sinceros. Gente totalmente distinta a vos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario